
LA NOCHE DEL CRIMEN / Puntaje: 8
Una joven mujer es asesinada y el crimen del mundo real, relatado por la autora francesa Pauline Guéna en su libro de reportajes “Testigo presencial” (2020), llega a la pantalla cinematográfica de modo inquietante. El destacado autor Dominik Moll, dos años después de sorprendernos con la brillante “Solo las Bestias” traslada a la ficción el guión del especialista Gilles Marchand, acerca de la infructuosa pesquisa policial por esclarecer lo sucedido. La fatídica fecha ‘del 12’ se convierte en una certeza acuciante. Ganadora de seis Premios César -incluyendo mejor película y dirección- sobre diez nominaciones obtenidas, “La Noche del Crimen” valida su excelencia mediante una construcción de los hechos sólida, fascinante y tensa.
¿Qué clase de mal anida en la lejana provincia francesa? De cara a un abismo que inspecciona el centro de la propia fuerza, y con miras a desenmascarar culpables sospechados, el misterio se desenvuelve con un reconocible aroma a Agatha Christie. La brutalidad del crimen cometido nos conduce a la falta total de explicación y sentido. El film, llevando a cabo una auténtica disección de la porción social examinada, ejercita la agudeza y la observación. Los investigadores lucen desconcertados, atrapados en pleno callejón sin salida, en este fenomenal thriller detectivesco que bebe de las fuentes del cine de David Fincher y Claude Chabrol. Evaluando las devastadores consecuencias del accionar violento e impune, Moll lleva a cabo un retrato pormenorizado, reafirmando el buen gusto y la tradición de la industria gala por el género policial.
DESAMPARADOS BAJO EL AGUA/ Puntaje: 6
Conmemorando diez años de la tragedia que enlutó a la ciudad de La Plata, en el Espacio Select ubicado en el Pasaje Dardo Rocha, se estrena “Desamparados Bajo el Agua”. El documental de Uriel Fernández recurre a testimonio de familiares de fallecidos, damnificados de la inundación y especialistas en la materia. Un acercamiento íntimo sobre la catastrófica inundación acontecida el 2 de abril de 2013, con miras de ejercer una mirada en retrospectiva: comienza en la actualidad y llega hasta la fatídica jornada. Este logrado producto audiovisual posa su mirada sobre un desastre que atravesó por completo a cada uno de los barrios de la ciudad de las diagonales.
En colaboración con ProyectoRaiz.ar, el portal 0221 produce un material que indaga en conflictos causantes del desastre, y aun no resueltos habiendo transcurrido una década del acontecimiento. Nefasto hecho que dejara pérdidas económicas y afectivas enormes. Los números son contundentes, arrojando un treinta y cinco por ciento de la población afectada, un total de ochenta y nueve muertes y el resquebrajamiento moral de una urbe cuya diagramación la vuelve propensa a las inundaciones. “Desamparados Bajo el Agua” es concebida como una convocatoria para generar conciencia. El documental, a lo largo de una hora de recorrido, refleja la angustia de sus habitantes y la negligencia de la clase dirigente. Conscientes del riesgo, y convenciéndonos que no siempre lo peor podría pasarle al prójimo y no a uno, el film invita a generar políticas de estado preventivas.
REPARO / Puntaje: 1
Lucía Van Gelderen nos trae una película en donde el componente marino y las aguas cristalinas disponen una paleta de colores precisa pero insuficiente. Entre los follajes de la región, paralelos y meridianos de la vida encuentran a Justina, quien cumplió treinta años y emprende su propia búsqueda existencial. ¿Qué la lleva a retornar al pueblo? Ella está en busca de respuestas y una misión: volver, por amor, al lugar de pertenencia, en donde se transitó la infancia; es parte del desafío. El encuentro con el pasado idealizado como elemento fundamental trama un relato que desaprovecha el nivel metafórico que sugiere la sabiduría y dinámica de vida de las autóctonas ballenas. Promediando el metraje, nos preguntamos: ¿adónde van destinados los fondos del INCAA? Diálogos intrascendentes se acumulan y el intercambio es irrisorio. Se desarrollan superfluas escenas que parecen sacadas de mediocres telenovelas vespertinas. Un tono melancólico pareciera primar, la anodina rutina nos ahoga en sopor.
El estereotipo deglute a cada uno de los personajes intervinientes en la historia: el monocorde tono de Florencia Torrente y la inexpresividad de Luciano Cáceres se amalgaman a la perfección. El amateurismo y la desprolijidad para hacer cine compiten, imponiéndose como sonado insulto a la inteligencia del espectador. Más desproporción aporta la lastimosa participación de Daniel Melingo, desafinando un tango alrededor del fuego. Abundan postales naturales cuya caprichosa inserción entre secuencias responde a un inútil intento de brindar algo de sustento estético a una propuesta sin inventiva alguna. “Reparo”, rodada durante la pandemia en locaciones de Puerto Pirámides -una localidad patagónica de escasos habitantes y afluencia turística-, fue estrenada en el último Festival de Cine de Mar del Plata. Llama poderosamente la atención semejante vidriera. Su autora es la también directora del cortometraje “Aguamadre” (estrenado en el BAFICI, en 2013).
OSO INTOXICADO / Puntaje: 4
Nada más letal que un oso hundiendo sus narices en una montaña de cocaína. “Oso Intoxicado” nos presenta a diferentes grupos de personas aliadas con propósitos, intenciones y misiones muy concretas: detener el andar del gigante descontrolado. Basada en un hecho real (un oso consume algunos gramos de cocaína con consecuencias desastrosas), la película se toma ciertas libertades creativas a la hora de evadir la pregunta obvia. ¿Quién en su sano juicio podría tomarse en serio esta premisa? “Oso Intoxicado” representa la auto conciencia de la banalidad. El derrotero encontrará excepciones a la regla dentro de un cúmulo de víctimas libradas a su suerte, valiéndose de efectos especiales que recrean al nefasto mamífero omnívoro.
La ambientación ochentera funge como gancho inmediato, mientras la directora de “Los Ángeles de Charlie” (2019), reparte, a diestra y siniestra, lecciones de familia y amistad insertas en medio de la masacre. Elizabeth Banks dirige a un ensamble coral engalanado por intérpretes de lujo: Ray Liotta, Margo Martindale y Keri Russell, pero, el auténtico protagonista es un oso que adquiere identidad diabólica; una criatura imponente y temible, capaz de despertar climas de tensión, comedia y horror. Los resultados podrían ser catastróficos. Cierto descuido prima en la sala de montaje, al tiempo que un film que no se toma en serio a sí mismo deja librado al azar más de lo suficiente respecto a ciertos detalles visuales pasados por alto.
Categorías:Rincón Cinéfilo
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