
“La producción de Iglesias Rossi refleja un espíritu paradójico. Es un artista que pertenece a su tiempo, en cuanto al lenguaje, pero cuya senda de búsqueda se acerca a la vertiente mística medieval más que a los aires finales del s. XX. Fiel a su origen latinoamericano, sus obras ostentan color local en los textos y los materiales sonoros y su visión apocalíptica se traduce en una tensión de la cual difícilmente el oyente puede sustraerse.” Diccionario de la Música Española e Hispanoamericana (Ed. Instituto Complutense de Ciencias Musicales, España 1999)
“La escritura de Alejandro Iglesias Rossi se encuentra en las puertas del silencio y del misterio, uniendo lo visible y lo invisible”. Radio Suisse Romande, Programa “Retrato de Iglesias Rossi”, Geneve, abril 28 del 2000.
«Conocer a Alejandro Iglesias Rossi es penetrar en una escritura musical entre la inmensa riqueza de las culturas indígenas de las Américas y los rumbos que proponen hoy las nuevas tecnologías. Iglesias Rossi es un artista profundamente comprometido que práctica un arte total del cuerpo y del espíritu, entre la memoria y la creación.» Radio France Culture, Emisión Equinoxe, marzo 22 del 2009.
Como compositor, Alejandro Iglesias Rossi recibió las dos Distinciones emblemáticas de la UNESCO: los Premios del International Rostrum of Composers (París-1985) por su obra Ritos Ancestrales de una Cultura Olvidada considerada “una obra maestra del siglo XX” por el International Music Council y del International Rostrum of Electroacoustic Music (Amsterdam-1996) por su obra Ángelus.
Su obra Harawi Ritual (sobre textos Quechuas), ha sido seleccionada para ser preservada por 1000 años en la bóveda subterránea del Global Music Vault del Polo Norte, cuyo objetivo es “proteger el futuro de la música guardando archivos fundamentales del pasado”. Sus obras han sido interpretadas alrededor del mundo en las grandes Salas de concierto: Lincoln Center, Centre Georges Pompidou, Carnegie Hall, Oslo Konserthus, Teatro Colón, Filarmónica de Varsovia, Concertgebouw de Amsterdam, Queen Elizabeth Hall de Londres, Hong Kong City Hall, entre otras.
Fue Jurado del Premio de Honor de la Música de la UNESCO 1991 (París), de los World Music Days 1992 (Varsovia) y del Premio de Composición Musical del Fondo Nacional de las Artes de Argentina.
Ha sido invitado a dar Seminarios en diversos países del mundo: Indonesia, Canadá, Nueva Zelandia, Jordania, Egipto, Francia, Polonia, Brasil, Colombia, Chile, Bolivia, Perú, Venezuela, Cuba, México, Puerto Rico, Sudáfrica y Singapur.
Como intérprete y director, fundó la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías y la ha dirigido en Giras alrededor del mundo, producto de las cuales es su último DVD que se encuentra en el catálogo de NAXOS.. El trabajo de la Orquesta fue premiado con el Musical Rights Awards del International Music Council (con sede en la UNESCO) por ser “un Programa inspirador que recobra y da vida artística a los instrumentos musicales indígenas, la mayoría de ellos olvidados, al mismo tiempo que desarrolla investigación, composición, Diplomas universitarios, cursoscomunitarios, exhibic iones, conciertos y un modelo pedagógico-musical para todos los niveles.”
El Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) de la Argentina le otorgó a la Orquesta la Distinción Eulogio Frites «por su compromiso como divulgadores de la música y la cultura indígena«.
El Parlamento del MERCOSUR declaró sobre la Orquesta: «Todo este modelo de investigación y creación es un proyecto único en el mundo e intenta abordar el conocimiento de una manera integral, cruzando los instrumentos autóctonos con nuevas tecnologías, el estudio con la creación, lo teórico con lo práctico, saberes modernos con saberes antiguos, y promoviendo una idea de la obra que la acerca a una concepción ritualista y celebratoria de la música.”
La Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires declara, a su vez: “El método reivindicado por quienes integran la Orquesta es un enfoque global que contempla la praxis artística integrada a la vida de la comunidad. Asi, queremos declarar de interés este trabajo por su valiosa concepción ética, antropológica y epistemológica porque creemos que debemos rescatar toda mirada que nos conduzca a cuidar y re-descubrir lo que somos y tenemos, y que con este modelo particular de vivir la música, vuelve a vincularnos desde experiencias cualitativamente valiosas y ricas, tanto por el propio sentido de la vida que se expone y multiplica, como por la promoción de vínculos emocionales, históricos y respetuosos de las diferencias.»
Como investigador ha recorrido América con el objetivo de recuperar los instrumentos musicales nativos desconocidos desde hace siglos (por ejemplo: sahumadores sonoros, botellas silbadoras zoomorfas y antropomorfas, silbatos de la muerte, flautas y ocarinas dobles, triples y cuádruples, etc.) e insertarlos nuevamente en el corpus instrumental disponible para la creación e interpretación contemporánea. Fundó y dirige el Centro de Etnomusicología y Creación en Artes Tradicionales y de Vanguardia sobre el cual el Parlamento del MERCOSUR declara: “es un espacio que nació con el objetivo de recuperar el contacto con las fuentes autóctonas de América, sin dejar de lado la investigación de vanguardia, sin lo cual la tradición queda confinada a simples recuerdos y no a vivencias actuales.”
Como educador musical, creó y dirige la Maestría en Creación Musical, Nuevas Tecnologías y Artes Tradicionales así como la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular de América en la Universidad Nacional de Tres de Febrero.
El Parlamento del MERCOSUR declaró sobre la Licenciatura: «Que la música entendida como un camino de reencuentro con las raíces de nuestro pasado americano, es el espíritu que está presente en la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular de América, toda una apuesta por recuperar la Historia de América Latina desde la sonoridad.»
Asimismo, el Senado de la Nación declaró «es una propuesta académica novedosa y singular, siendo el resultado de una experiencia rica en memoria y proyección. Desandando el aprendizaje histórico de la música, ligado a la tradición europea, la Licenciatura se propone dar visibilidad a técnicas, instrumentos y formas de transmisión de la música olvidadas, o muchas veces, desconocidas. Así, desde sus comienzos en 2015, se trabajó en un ámbito de aprendizaje basado en la investigación, la luthería y la interpretación, una combinación que dió forma a una epistemología única en la región y en el mundo. Es un orgullo que la universidad pública y gratuita esté abocada en la producción y difusión de estos saberes.”

-El documental “Oiant, Música para un Futuro Ancestral” indaga en la identidad y las raíces, en la transmisión de generación en generación de valores que reflejan la esencia y tradición latinoamericana. Alejandro, ¿por qué pensás que es vital este aspecto de recuperar nuestra memoria a través de las costumbres?
En el mundo actual, en el que la genuina creatividad cultural se encuentra amenazada de desintegración por la globalización hemos buscado crear en la Orquesta un modo alternativo para la creación, interpretación, investigación y enseñanza musical en nuestro continente, alejado del paradigma hegemónico del Norte, y enraizado en una epistemología de descolonización. Así, creo que sería propicio citar las palabras que decía hace ciento cincuenta años Simón Rodríguez (maestro y compañero de Simón Bolívar) en el texto «O inventamos o erramos»:
«Véase a la Europa cómo inventa,
y véase a la América cómo imita.
América no debe imitar servilmente, sino ser original.
¿Y dónde vamos a buscar modelos?
Somos independientes, pero no libres
dueños del suelo, pero no de nosotros mismos.
Abramos la historia,
y por lo que aún no está escrito,
lea cada uno en su memoria”.
Es esta búsqueda de un “ser y un hacer” enraizados en nuestra propia geocultura, como lo concebía el filósofo y pensador argentino Rodolfo Kusch, la que llevó a crear la OIANT, concebida como espacio de reflexión sobre lo que significa ser artista en América. En este sentido, puedo citar palabras de Boaventura de Sousa Santos, en la III Conferencia Regional De Educación Superior de la UNESCO: “La Orquesta me impactó de manera brutal, porque eran las Epistemologías del Sur las que estaba oyendo y viendo, otra manera de expresar lo que yo no logro expresar en mis charlas, ustedes acaban de ver lo que la ciencia, el conocimiento logocéntrico, no puede conocer: la espiritualidad de las cosas, esa fuerza trascendente dentro de lo inmanente. Es el Arte que camina sobre la línea abismal haciendo de nosotros hombres y mujeres más dignos, con la fuerza de la espiritualidad y la dignidad.” El trabajo de revalorización de la organología y de recuperación de las fuentes autóctonas ha dado como resultado la creación de la Colección de instrumentos nativos de América en uso más importante en el mundo, la cual ha sido objeto de múltiples Exposiciones durante sus Giras. Este Documental, que llega luego de dieciocho de años de existencia de la Orquesta y habiendo presentado su trabajo en los cinco continentes, toca el tema de la operatividad del Modelo interdisciplinario de la OIANT.
Algunos jalones son el otorgamiento a la Orquesta del Musical Rights Award del International Music Council de la UNESCO durante el último World Forum on Music en Australia destacándola por “ser un Programa inspirador que recobra y da vida artística a los instrumentos musicales indígenas, la mayoría de ellos olvidados, al mismo tiempo que desarrolla investigación, composición, Diplomas universitarios, cursos comunitarios, exhibiciones, conciertos y un modelo pedagógico-musical para todos los niveles.” O la Declaración del Parlamento del MERCOSUR sobre la Orquesta: “Este modelo es único en el mundo e intenta abordar el conocimiento de una manera integral. En este cruce de los instrumentos autóctonos con las nuevas tecnologías, el estudio con la creación, lo teórico con lo práctico y los saberes modernos con los saberes antiguos, se promueve una idea de la obra que la acerca a una concepción ritualista y celebratoria de la música”.
También ha sido plasmado en el film el desarrollo del vector académico y pedagógico de la OIANT, iniciado con la creación de la Maestría en Creación Musical, Nuevas Tecnologías en el año 2006 y continuado con la creación de la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular de América en el 2016. Sobre este Modelo académico que creamos declaró el Senado de la Nación: “Es una apuesta por recuperar la historia de América desde la sonoridad además de ser una propuesta académica singular, resultado de una experiencia rica en memoria que dió lugar a una epistemología única en el mundo. Es un orgullo que la universidad pública esté abocada a la producción y difusión de estos saberes”.
-En “Oiant…”, la búsqueda, preservación y recuperación de elementos perdidos constituye un viaje iniciático, un auténtico aprendizaje a través de esta mixtura entre lo atávico y lo contemporáneo. ¿Podemos decir que se trata de la piedra angular sobre la que se construye el documental?
Enfrentar la homogeneización emanada de la globalización implica la conciencia de que no puede haber un arte sin historia y sin raíces y, por otro lado, tampoco una tradición sin renovación. El gran compositor Heitor Villalobos había querido sintetizar su visión sobre esta problemática en los años cincuenta del siglo pasado con una “boutade”, cuando ante una pregunta de un periodista sobre: ¿qué es el folclore? le respondió: el folclore soy yo. Ampliando este concepto de Villalobos, diría que la Orquesta es el producto de nuestra tierra, está hecha del aire de las pampas, de la nieve de los Andes, de los cuerpos de cóndores que al polvo volvieron, de las esperanzas y dolores que quedaron impregnadas a través de las generaciones en el cielo de América, es por eso que si encontramos quienes somos, el producto no va a ser solamente personal sino telúricamente propio del lugar, de la geocultura que nos vio nacer y desarrollarnos. Y de la misma forma que la ciencia moderna sabe hoy que el aleteo de una mariposa en el Amazonas puede terminar generando un ciclón en el Japón, así también somos el producto de los sueños y dolores de las almas que habitaron a través de las generaciones este extraño planeta, del color de las arenas del Sahara, y de los pedregullos de la última aldea olvidada de la Tierra. Así cada uno de nosotros encontrando su propio lugar en esta sinfonía cósmica puede llegar a ser absolutamente único y al mismo tiempo absolutamente universal.
Boaventura de Sousa Santos expresa en el Documental sobre la Orquesta: “No hay futuro sin arte y el arte del futuro es transformar el pasado en futuro, y eso es lo que hace Alejandro con la Orquesta”. La Orquesta reconstruye los instrumentos musicales autóctonos de América (de la Patagonia hasta Alaska), y los incorpora a la creación contemporánea como parte de nuestra identidad geocultural. Este trabajo de recuperación del patrimonio cultural de nuestra América parte de la convicción de que la investigación histórica etno y arqueomusicológica que va hacia las fuentes autóctonas para recuperar el acervo de una cultura que sigue constituyendo un vector fundamental de la trama profunda (y vigente) de nuestra existencia. Asimismo, este trabajo se encuentra ligado a una continua búsqueda de vanguardia en la creación de música contemporánea instrumental y electrónica, que actualiza las multiformes expresiones de esa fuente genuina cual se renueva inagotable para aquel que se reconozca religado a su origen.
Decía Radio FRANCE INFO – 12/3/2009: «Esta es una Orquesta que rechaza el concepto de frontera, de cualquier tipo que sea. He aquí una verdadera reflexión sobre el concepto de `frontera´: frontera entre modernidad y tradición, entre Europa y América Latina, pero también cualquier tipo de frontera, por eso todos los miembros de la Orquesta son autores, compositores, intérpretes e inclusive luthiers.”
-Confluyen en el documental años de filmación y ensayo, ¿cómo podrías colocar en perspectiva el proyecto una vez realizado?
Este Documental comienza con la propuesta de Nacho Garassino de plasmar en un film el trabajo que venimos realizando con la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías desde el año 2004 en la Untref, que él describe como “una declaración de principios”. Desde una mirada personal que parte de su profundo compromiso político y social, Nacho dice “La Orquesta es latinoamericana, vanguardista, revolucionaria y a ella le sumamos la fuerza poética del documental y su potencia narrativa”. El film toma como eje narrativo la Gira de la Orquesta por Cusco y desde allí rememora experiencias vividas en diversas Giras, en palabras de Nacho: “Se trata de un apasionante viaje por los instrumentos y sonidos ancestrales, que reviven gracias a esta orquesta que lucha por establecer un nuevo paradigma musical, liberado de las tendencias hegemónicas. Este es un viaje iniciático junto a sus músicos: desde la investigación de códices precolombinos para construir instrumentos perdidos, la combinación con las nuevas tecnologías, hasta sus conciertos por todo el mundo que son auténticos rituales en escena. A partir de la gira por Perú como eje narrativo, recorremos la historia de la OIANT y sus pasos por todos los continentes, interactuando con sus culturas.””. El documental presenta testimonios de Adolfo Pérez Esquivel, Boaventura De Sousa Santos, Leo Brouwer, Carlos Nuñez, Charo Bogarín y Juan Palomino, mostrando el trabajo interdisciplinario y de recuperación del patrimonio cultural que la Orquesta realiza tanto en lo artístico como en lo académico. La concepción que desarrolla la Orquesta es la de “artista integral”, siendo cada miembro investigador, luthier, intérprete, compositor, tecnólogo, iconógrafo, escultor de máscaras nativas y docente. Desde el 2009, Nacho Garassino acompañó a la Orquesta en sus Giras por el Desierto del Sahara, por Cusco, en la Patagonia, en los Festivales Berlioz y Messiaen de Francia, en la Biblioteca de Alejandría de Egipto, Túnez, con las Comunidades Maoríes y en el Museo Nacional de Nueva Zelandia, en el Festival Cervantino de México, en los World Music Days de Hong Kong, en el Festival Leo Brouwer en La Habana, en el Festival de la ciudad medieval de Ljubljana de Eslovenia, en Indonesia, Polonia, Singapur, Sudáfrica, Brasil, abriendo la Conferencia Regional de Educación Superior organizada por la UNESCO frente a los 500 rectores de universidades públicas de América latina, documentando los hitos en la historia de la Orquesta que quedaron registrados gracias al film.
-Contanos acerca de la participación de la Universidad Tres de Febrero a lo largo de este proceso, y desde cuándo estás vinculado a dicha institución.
El Proyecto académico-artístico que comenzó en 2004 con la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías y abarca a la Maestría en Creación Musical, Nuevas Tecnologías y Artes Tradicionales, así como la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular de América que dirijo en la UNTREF ha podido sostenerse durante casi veinte años gracias a la comunión de Anibal Jozami y Martin Kaufmann, Rectores de la Universidad Nacional de Tres de Febrero, con la visión de este Proyecto.
-La música ritual está estrechamente ligada a los mitos y leyendas, como fuente de existencia y creencia. Allí reside algo mágico que manifiesta esta función simbólica y espiritual que posee la música, trascendiendo el tiempo. ¿Cuánto de esta cosmovisión está presente en tu concepción del lenguaje?
Quizás, la mejor manera de definir esta búsqueda de unión, se expresa en los comentarios sobre los conciertos de la Orquesta: «La Orquesta une la espiritualidad antigua con la sensibilidad moderna. Una magnífica meditación sobre el posible destino de la Tradición y los avances tecnológicos. Con la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías, Alejandro Iglesias Rossi ha creado un medio musical digno de elogio en el que el pasado y el futuro se correlacionan pacífica y bellamente». The Jakarta Post Newspaper (Indonesia; 19 de noviembre de 2007).
«Ritualidad y éxtasis en la música artística latinoamericana: Alejandro Iglesias Rossi dirige y enfoca la energía musical del Ensamble desde la meditación hasta el éxtasis. Según Iglesias Rossi, la creación musical se basa en la percepción de la conexión con la herencia ancestral, así como en el ansia de perfección». Periódico Posttimes (Tallin, Estonia; noviembre de 2006).
En su línea directriz de búsqueda, la Orquesta tiene el propósito de recuperar el contacto con las fuentes autóctonas de América, no como una idealización o un retorno al pasado sino como el despertar de una semilla latente que solo necesita del genio creador que la asuma, para volver a dar su original y sustancial fruto dentro de las estructuras, materiales y tecnologías que se han ido desarrollando. Lejos de rechazar el aporte de la modernidad, buscamos la integración como modo de reactualizar y resignificar el hecho de ser americanos. En este sentido, creo que la tradición no debe estar separada de la creación, porque en ese caso la tradición se vuelve pieza de museo y, asimismo, la creación debe estar ligada a la Tradición, sino será como un árbol sin raíces. En este sentido Boaventura de Sousa Santos dice sobre la Orquesta: “Nosotros hemos vivido en esta última hora al escuchar a la Orquesta en tiempos distintos pero ¡al mismo tiempo! El tiempo tecnológico y el tiempo antiguo de los sonidos ancestrales milenarios con la altísima tecnología, es un palimpsesto. Y el arte del futuro, es transformar el pasado en futuro, eso es lo que hace Alejandro. El pasado no pasa. Nadie pasa. Todo está pasando, como decía Rodolfo Kusch. Nosotros somos, y somos instantes, y vamos estando. Estar es otra cosa. Estar totalmente.” La posibilidad de encontrar un camino artístico en que tanto lo autóctono, la tecnología digital y lo europeo florezcan sin ningún tipo de dicotomía, es fundamental. Retomando las palabras de Boaventura de Sousa Santos en la clausura del Congreso Internacional de animación Sociocultural: “Lo que Alejandro hace es lo que yo llamo una ´ruina semilla´. Él va a las ruinas del medioevo europeo, de los indígenas de América Latina, y las transforma en semillas de algo nuevo. Y quizá la Orquesta es la más completa realización de una “ruina semilla” que alguna vez haya visto a la luz del trabajo que estoy proponiendo. No hay otra mejor, más completa, que realice una ecología de saberes no solamente musicales sino espirituales, culturales, filosóficos, religiosos. Añadiría que un eje fundamental de la Orquesta (y que aparece en este Documental) es el entrenamiento corporal, donde se realizan movimientos transmitidos hasta el día de hoy por Tradiciones autóctonas americanas así como rutinas tomadas de las Disciplinas marciales orientales. Estas incluyen ejercicios de fortalecimiento y resistencia, así como conceptos fundamentales de manejo de la energía (Qi, Tan tien, respiración, acondicionamiento físico, etc.). Este trabajo físico nos permite abordar dos conceptos claves: el de Ritualidad y Sacralidad, ambos conceptos actúan sinérgicamente para permitir que la multidisciplinariedad de este Modelo se unifique a través de una plasmación en el escenario que es a la vez intelectual y física.En nuestro tiempo, en que la genuina creatividad de los pueblos está siendo amenazada por la desintegración, las naciones necesitan recuperar sus propias raíces dentro de un mundo que ha sido precipitado a una globalización que disuelve sus rasgos más originales cada cultura necesita, hoy más que nunca, transitar caminos propios. Nuestro objetivo primordial como músicos debería ser el compromiso incorruptible de preservar los valores humanos y espirituales expresados en la multiforme diversidad de las culturas tradicionales de los cinco continentes.
-¿Y cómo se implementa este aspecto desde la formación y el acceso al conocimiento?
En ese sentido, el Modelo artístico-académico que hemos creado en la Untref propone sentar las bases de una pedagogía alternativa de aquella heredada de los estudios académicos de la tradición musical europea, resaltando la diversidad de expresiones musicales de América y distanciándonos de una visión heredada de la Revolución Industrial con su característica “compartimentación del saber”. Asimismo, la Orquesta propone la concepción de “artista integral”, que es quien aúna en sí mismo las capacidades multidisciplinarias de investigador, luthier, intérprete, compositor, tecnólogo, iconógrafo, escultor de máscaras nativas y docente, dejando así de lado el paradigma instalado en la música a partir, fundamentalmente, de la Revolución Industrial con su compartimentación del saber. En este Modelo creemos que esto es esencial para que el arte de vanguardia recupere su función mitológica ya que, entonces, la multitud de formas de expresión que se tejen en la profundidad de nuestra existencia pueden revelarse como inagotables para quien reconoce esta reconexión con sus orígenes. Y junto al redescubrimiento de esta visión iniciática del Arte, creemos necesario revisar el proceso compositivo en lo que se refiere a la lógica instrumento-gestualidad-técnica siendo que históricamente, el extraordinario ascenso de la espiral del conocimiento tuvo una consecuencia fundamental inesperada: el alejamiento del núcleo mítico embrionario. Así, la Unidad primordial terminó por fragmentarse en el concepto de la especialización técnica del conocimiento. Hoy es necesario redimir y restaurar esta Unidad perdida mediante un marco conceptual que nos permita reencontrar el camino hacia la Unidad ontológica fundamental. Redirigir los parámetros de la creación musical en una nueva relación con los instrumentos autóctonos lo hace posible de nuevo a través de lo que los antiguos sabios de las Américas (los «hombres del conocimiento») dieron en llamar «el Camino con corazón». Nuestro desafío es generar un cuerpo orgánico; una Teoría y una Praxis en armonía con las coordenadas espacio-temporales y la matriz poética del linaje espiritual de las Américas.
-Alguna vez leí acerca del poema que te dedica nada menos que John Cage. ¿Cómo recordás esta singular anécdota y cómo podrías definir el valor pionero de un teórico de su talla?
En 1988 la International Society for Contemporary Music (ISCM) elige veinte compositores contemporáneos emblemáticos de los diferentes continentes: entre los cuales Penderecki, Xenakis, Andriessen y Berio, con motivo de realizar una serie de programas de televisión producidos por la televisión polaca y la productora KAFE Films de Francia. Al escuchar John Cage mi Programa y las explicaciones sobre mi música que le daba a Zygmunt Krauze (entonces Presidente de la ISCM) decide escribir el Poema (que él llama Mesostic porque tiene mi apellido como columna vertebral del mismo). Como bien dice una de las solistas de la Orquesta en el film, Cage es capaz de sintetizar en pocas palabras mi búsqueda (ella cita especialmente la frase: I am trying to get closer to someting I don´t really know).
-En esta búsqueda espiritual y cultural que lleva adelante la orquesta, ¿qué postura adoptan frente a nuestra realidad política como continente? ¿qué valores debemos de preservar en pos de nuestra identidad?
Los miembros de la Orquesta son hijos de unas coordenadas espacio-temporales específicas y asumen este hecho de forma amplia, sabiendo que si nos comprometemos profundamente con la libertad de la búsqueda geocultural, el producto va a ser no sólo personal sino telúricamente propio del lugar al que pertenecemos. Buscando con la más profunda inflexibilidad la persona profunda, la “hipostasis” se logra una producción profundamente personal que es, al mismo tiempo, universal. Por eso, la orquesta es, en el sentido más noble del término, un combate político ya que si existe una búsqueda espiritual, ésta tiene que plasmarse también de forma política y cultural. Y esa búsqueda implica fundamentalmente, desde el punto de vista identitario, decir que no queremos ser colonizados. La descolonización es nuestra meta. Es nuestro desafío como creadores contemporáneos el de generar un Corpus orgánico; una Teoría y Praxis acordes a las coordenadas espacio-temporales de la matriz poética de Abya Yala, linaje espiritual de nuestra América.
-Hablemos de bandas sonoras de cine. ¿Quiénes son tus compositores favoritos y qué nos recomendás de cada uno de ellos para adentrarnos en sus obras?
Sin duda Edward Artemiev, el músico de Tarkovski, de quien soy amigo hace muchos años y que forma parte del Consejo Honorífico de la Maestría que dirijo, es para mí el ejemplo emblemático de un compositor de cine por el que tengo la más alta estima. Otro ejemplo de compositor extraordinario para cine son mis queridos amigos Leo Brouwer y quien fuera mi maestro de composición musical: Sergio Ortega, más conocido por haber compuesto la canción El pueblo Unido Jamás será Vencido.
-Por último, contanos en que te encontrás trabajando actualmente.
Paralelamente a las Giras por Argentina y Chile que estamos encarando con la Orquesta, en este momento estamos terminando un Film llamado Dora, la memoria de la magia sobre la investigadora Dora Ochoa de Masramon. El Film, en el que también actúo y compongo la música, será estrenado el 24 de octubre próximo.
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