
Gestos huraños, nudos de sufrimiento
parecen leyes de la jungla citadina;
donde las ideas se tuercen,
como árboles temblorosos
ante el aroma a leña quemada
que trae el aire,
acompañado por los acordes
de un viejo pájaro tango
con su trinar de bandoneón
como loco, piantao,
que trae melancolías piazzolianas.
Como un poema de polvo solar
las notas se alzan livianas.
Urbe y nostalgia
se extienden por la noche.
Categorías:Poesías al Margen
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