
Miles Davis (trompetista)
26 de Mayo de 1926 – 28 de Setiembre de 1991
Escribir en una breve columna como esta sobre la increíble vida y obra del “Príncipe de la oscuridad” es una tarea imposible de realizar. Lo que si me animo a escribir son algunos de los episodios más destacables dentro de la carrera de este músico impar.
Miles Davis comenzó a tocar profesionalmente en la ciudad de East St.Louis. En al año 1944 se traslada a New York, época esta en donde el bebop se tocaba y escuchaba en casi todos los bares y clubes de esa gran urbe. Se subió a los escenarios junto a Charlie Parker y Dizzy Gillespie.
Su adicción al exceso de drogas y alcohol fue una marca que lo perseguiría durante gran parte de su carrera.
Tocó con casi todos los músicos que pudo y que necesitó para reproducir los sonidos que su inquieto estilo musical le requería. Pasó del jazz más tradicional hasta llegar a coquetear con los sonidos innovadores y desafiantes del rock eléctrico.
Dejó grabados discos tremendos. Cada uno de ellos contiene en sonidos y coloraturas todo lo que Miles declamaba.
De a poco se fue alejando del público que lo seguía. Su sonido se tornó más denso. El uso de un pedal de wah-wah conectado a su trompeta lo llevó a latitudes no muy comprendidas en esos tiempos.
Hacia el final de su carrera, la vida descontrolada y los excesos, sellaron las cuatro décadas de una carrera musical irrepetible.
Cientos de músicos llevan y llevaron en sus sonidos el gen de Miles; John Coltrane, Bill Evans, John McLaughlin, John Scofield, Mike Stern, Kenny Garret, Dave Holland, Ron Carter, Chik Corea, Jack Dejohnette y tantos más así lo atestiguan.
Categorías:Body & Soul
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