
El futuro ya no está
se perdió entre el furioso oleaje
y el viento
arrasador de sueños.
Hay nostalgia del paraíso.
La fruta ya no está en el tallo
y el hombre
no es árbol, ni planta, ni flor…
¿Qué es?
Acaso lucero titilante
en la noche inmensa
donde impera la esterilidad.
En ella,
estalla en añicos,
se dispersa,
ya no está,
sólo piedras y plumas.
Categorías:Poesías al Margen
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