A veces una obra no necesita más que un par de pinceladas para dejar selladas las sensaciones inherentes a cada creación. No siempre esto pasa. Con las canciones cada individuo cae inevitablemente en lo autorreferencial, ya que las músicas son en definitiva una parte esencial y constructiva de nuestro personal ADN. El siguiente párrafo intentará crear un pequeño mundo en palabras, del cual ciertas canciones son  protagonistas casi exclusivas.

“Credulidad”      ( L.A.S.  ) 3.05

Se encerró en el departamento y no había forma de hacerla entrar en razón. La mañana ya había cubierto de luz todas las cosas en el pasillo. Esperó que bajara a comprar algunos caramelitos y su mejor venganza fue pensar en quedarse encerrada y dejarme del otro lado de la puerta sin contestar mi llamado. El único sonido que como un difuso eco armaba en mi cabeza la imagen interior de esa habitación, era la canción que una y otra vez sonaba en el Winco. Era un vinilo pequeño, con un tema de cada lado.

El desenlace de esa ríspida situación poco importa en este momento, pero el mantra de esa melodía escuchada de pie tras es infranqueable puerta, siempre regresa armándome una nueva imagen en mi cabeza.

…tu mente ya estará progresando…

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